DESIERTO DE LA TATACOA Y EL PARQUE ARQUEOLÓGICO DE SAN AGUSTÍN
La visita al Desierto de la Tatacoa, también conocido como el Valle de la tristeza, es una de las maravillas de la parte sur interna de Colombia.
Esta zona árida en particular no tiene nada que ver con la imagen tradicional de las dunas de arena. Sus 370 kilómetros cuadrados son una vasta extensión de bosque seco semi-árido, con cactus y algodón silvestre y formaciones geológicas raras y hermosas: esculturas producidas por la erosión del tiempo, de diferentes tonos de color ocre y tonos lunares. Muchos animales tal vez inquietantes viven en el desierto como serpientes y escorpiones, así como lagartos y águilas, pero con un poco de cautela no quitan el placer de visitar una de las regiones más singulares y fascinantes de Colombia.
El Parque Arqueológico de San Agustín se extiende en un «área de 500 kilómetros cuadrados, donde hay unos seiscientos megalitos que representan figuras humanas y animales, la evidencia histórica de un patrimonio artístico y cultural de los más importantes de la América precolombina del Sur y del mundo. Las estatuas son esculturas monumentales de gran belleza y cuidadoso diseño: con cierto carácter funerario, otros personajes importantes son representaciones de dioses o de adoración que se hace de acuerdo a las necesidades. Representa uno de los sitios arqueológicos más importantes de América del Sur uniéndose a la lista de la UNESCO Patrimonio Cultural de la Humanidad
